A casi un año del primer caso reportado de Covid19 en México, el balance de la actuación del gobierno mexicano ante la pandemia deja mucho que desear.
Muy lejos estamos de aquel escenario muy catastrófico de 60,000 muertos que señalaba el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, el doctor Hugo López-Gatell.
Esta pandemia es un problema mundial, pero vivir en México representa un riesgo para la salud mucho mayor que en el resto del mundo, incluso si nos comparamos con países de África. Nuestro país ocupa el segundo lugar con la mayor tasa de letalidad en el planeta después de Yemen.
Este riesgo es atribuible al mal manejo de la pandemia y no a condiciones de salud preexistentes en los mexicanos como la obesidad y la diabetes, como han querido hacernos creer algunas autoridades del sector salud. Según el estudio del Instituto Lowy de Australia, México es el segundo país con el peor manejo de Covid19 entre los 98 países evaluados, considerando criterios como número de casos, tasa de letalidad y pruebas realizadas.
Medidas como el uso obligatorio de cubrebocas en espacios públicos, aplicación masiva de pruebas y seguimiento de casos hubieran evitado miles de muertes según expertos de la OMS (Organización Mundial de la Salud), por lo que es incomprensible que el presidente de México siga argumentando prohibido prohibir cuando se trata de salvar vidas de mexicanos.
Es de llamar la atención el desprecio que ha tenido el gobierno ante las recomendaciones de diversos expertos nacionales e internacionales. Por mencionar alguno, el documento Gestión de la pandemia en México publicado el pasado 9 de septiembre del 2020 por seis ex secretarios nacionales de salud, el cual fue desdeñado en una declaración lamentable del doctor Gatell, quien hizo caso omiso de ésta y otras sugerencias que hubieran salvado miles de vidas.
El mal manejo de la pandemia ha ocasionado, en nuestro país, la pérdida de miles de vidas de mexicanas y mexicanos. Además de serios estragos en la economía, educación e incremento en la violencia intrafamiliar por mencionar algunos problemas colaterales. Esto se pudo haber evitado, hay una seria responsabilidad del gobierno federal al no atender el llamado a preservar el derecho humano a la salud y a la vida de la población.
Más allá de las cifras, cada enfermo, cada muerte significa el dolor de una madre, un hijo, un cónyuge, la orfandad y el desamparo. Ver truncado el proyecto de vida, el dolor humano que no podemos medir con números. Nuestra solidaridad con quienes se encuentran enfermos, con secuelas por la enfermedad o han perdido un ser querido. Los abrazamos desde el corazón.
El haber encontrado la vacuna contra la Covid19 ha traído esperanza en todo el mundo. Es responsabilidad de los gobiernos proveer la vacuna a su población de manera masiva, universal, gratuita y pronta. Sin promover su entrega como logros del gobierno en turno, como se ha hecho en nuestro país.
En México, el Plan Nacional de Vacunación contra Covid19 muestra serios problemas de diseño, planeación e implementación.
En Futuro 21 hacemos un llamado al gobierno federal para:
- Dar un golpe de timón y enmendar la estrategia nacional contra la Covid19 de acuerdo a las recomendaciones y experiencias exitosas nacionales e internacionales. Todavía hay tiempo de salvar muchas vidas.
- Crear un comité científico del más alto nivel para evaluar y dar seguimiento a decisiones de salud y otros sectores primordiales.
- Considerar que este proceso será largo. La Covid-19 llegó para quedarse. La inmunidad no es total y existen mutaciones por lo que habrá que tomar medidas pertinentes como la vacunación recurrente.
- Tener un plan de vacunación con vacunas. Asignar una partida presupuestal que garantice la adquisición de las dosis necesarias de la vacuna contra la Covid-19 para inocular a toda la población.
- Ofrecer mayor claridad con respecto a los contratos celebrados con las diversas farmacéuticas productoras de vacunas para dar certeza al abasto y cobertura en todo el país.
- Evitar la improvisación. Capitalizar décadas de experiencia exitosa del Sistema Nacional de Vacunación y la colaboración con el sector privado quienes han ofrecido su ayuda en repetidas ocasiones, como se ha hecho en otros países.
- Incorporar el sistema de citas operante y eficiente con el que cuenta por ejemplo el IMSS, para evitar las largas filas en los centros de vacunación.
- Dejar de politizar el tema de salud, el cual es un derecho humano que debemos preservar y no llevar al campo de lo político particularmente en el Congreso de la Unión.
- Garantizar la vacunación en todo el país de manera pronta y expedita a todos los sectores de la población, dando especial atención a los profesionales de la salud que se encuentran al frente de esta enfermedad.
- Extremar precauciones para admitir viajeros procedentes de otros países. Exigir pruebas negativas de Covid19 a todos los viajeros que quieran ingresar al país.
A todos los habitantes de este bello país, les hacemos un llamado para seguirnos cuidando, la vacuna no significa inmunidad inmediata. Además, no sabemos cuándo nos tocará y si habrá disponibilidad de la segunda dosis. Sigamos estrictamente las recomendaciones sanitarias como el uso correcto de cubrebocas, la sana distancia, el lavado frecuente de manos y todas las medidas necesarias para preservar la salud y la vida. Si el gobierno falla en atender nuestra salud nosotros no fallaremos.